Verdades
sueltas a destiempo
Tiempo
pasado y a contracorriente.
Los ojos
siempre mienten
Harapos
rondaban los pliegues.
Sucedáneo
de chaqué, sobre percha
Verdad,
mentira, realidades, ficciones
Miénteme
aunque sea por mi bien.
Rasgado
el cuerpo quedó
Tras la
última lucha de verdades
Desaliño
de pendencias sin valor
Todo
queda anclado en el olvido
El negro
toga al dulce son del humo del cigarro
Ella,
entretanto, canta con voz melodiosa
Inapropiada
para su cuerpo
Como
todo, parece mentira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario