Hielo
Rojo…
Las tres
rendijas que dejas en la celosía, ocasionan
Los
cuántos iguales de líneas de baile ceniciento
En
mañanas de dispares instantes, al despertarnos.
Ruidos
de surcos de grafito recorridos por agujas sabias
Derramando
el céfiro por las órbitas de la gramola
Te
extasiabas al sentir años en blanco y negro, sonoro.
Dibujabas
mal esas líneas sobre tus labios, ese blando lápiz
Envidia
me daba, celos de su recorrido sinuoso en tus recodos, delimitando las lindes
de tus belfos
Mordías
el cubículo helado, de prieta agua, chorreante
Contrastando
tus rojos, mi transparencia, tus fuegos.
Guiabas
entre gemidos, el recorrido de mapas de agua fría
Naciendo
ríos, rayaba el deshielo primaveral, floreciendo
Las
tesituras dispuestas en los comienzos se deshacían y
Te
perdías en los ligeros descensos de riachuelos de cremoso amanecer.
Avergonzada
pedías perdón, por esas tonterías, decías.
Si supieses,
te respondía
Cuan
años siembras en mi ser, vástagos de enaltecimiento
Como si
fueran tierras yermas rejuvenecidas, si comprendieras…
Regocijémonos con tanta tontería, qué si no, qué
merece si no.
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